El primer campo de fútbol de Eibar fue el Otola-erdikua que fue clausurado en 1917. Tras la creación de la Sociedad Deportiva Eibar en 1940, el equipo usaba como campo local el césped de Lerún ubicado en Elgoibar.

Fue inaugurado el 14 de septiembre de 1947 en un partido amistoso entre el equipo local y el vecino de Elgóibarcon el resultado fue de derrota 2 a 0.

La tribuna principal se empezó a levantar en 1948 quedándose abierta al público en 1951. El campo por aquel entonces no tenía pasto y con la lluvia se convertía en un auténtico barral, hasta que se realizaron las primeros retoques en el césped y drenaje en 1959.

Durante más de 2 décadas el estadio fue de Tercera División y en tan solo 3 años consiguió ser uno de los 40 campos más importantes de España al ascender a Segunda División en 1988. Es por eso que gracias a la ayuda del Ayuntamiento y de la Federación consiguieron ayudas para modernizar el campo en su integridad. Hasta ese momento la capacidad del estadio era de cerca de 10.000 personas, la mayoría de pie.